Warren Buffett a Trump: “¿No tiene el menor sentido de la decencia, señor?”
El famoso inversor arremete contra el candidato republicano y le reta a publicar su declaración de la renta
Warren Buffet to Donald Trump: “Have you no sense of decency, sir?”
Warren Buffett, uno de los hombres más ricos del mundo y el inversor más respetado de Wall Street, se despachó este lunes contra Donald Trump, aspirante republicano a las elecciones presidenciales
En un mitin en el que arropó a la rival demócrata, Hillary Clinton, Buffett retó a Trump a presentar junto a él su declaración de la renta, algo a lo que el candidato se niega, y le atacó por su ofensa a la familia de un soldado estadounidense caído en combate. “¿No tiene usted sentido de la decencia?”, preguntó Buffett, rescatando de hace medio siglo la famosa pregunta del abogado Joe Welch al senador Joseph McCarthy en una de las audiencias de la caza de brujas.
Las críticas de Buffett, presidente de Berkshire Hathaway, llegan poco después del ataque feroz que otro millonario, el exalcalde de Nueva York Michael Bloomberg, lanzó contra Trump en la convención demócrata de Filadelfia, la semana pasada, donde le acusó de “demagogo peligroso” y “timador”.
Buffett presentó a Clinton en un acto de la candidata en un instituto de bachillerato en Omaha, en el estado de Nebraska, de donde el famoso inversor de 85 años es originario. En sus palabras introductorias puso el dedo en una de las llagas electorales de Trump: su negativa a presentar la declaración de impuestos alegando que están en proceso de auditoría. Le negó el argumento: “Yo también estoy en proceso de auditoría y estaría encantado de citarme con él en cualquier sitio, a cualquier hora, antes de las elecciones… Yo llevaré mi declaración, él puede llevar la suya… y dejamos que la gente haga preguntas sobre lo que hay ahí”, dijo arrancando aplausos del público.
El también conocido como 'oráculo de Omaha', con acciones en compañías como Goldman Sachs o Coca-Cola, ya hizo público su apoyo a Clinton el pasado diciembre, en un acto en el que defendió las subidas de impuestos a los más ricos. Esta es la primera vez que entra en la campaña oficial, una vez pasadas las convenciones que han confirmado a los candidatos de los dos grandes partidos.
Los dardos de Buffett, como los de Bloomberg, resultan especialmente dañino a un Donald Trump que ha hecho de su condición de empresario una de las principales bazas electorales: se vende como hombre de éxito que pretende gobernar la nación de la misma forma que sus negocios y que, por tanto, Estados Unidos irá muy bien. Pero magnates como estos dos, de mucha más envergadura que el promotor neoyorquino le han negado la mayor y han alarmado contra una presidencia suya. También el millonario Mike Cuban, dueño del equipo de la NBA Dalls Mavericks, apareció por sorpresa este sábado en un acto de Clinton y pidió el apoyo para la candidata.
Las grandes fortunas están respaldando en mayor medida a Clinton, que, paradójicamente, ha sacado adelante en la convención demócrata unos de los programas electorales más escorados a la izquierda en décadas.
Fuente: El país