Alibaba se estrena en Wall Street valorada en 132000 millones
El conglomerado chino logra la mayor oferta en la historia del parqué y potencialmente del mundo
Alibaba irrumpe con fuerza en Wall Street. El conglomerado chino, un híbrido entre Amazon, PayPal y Twitter, recaudará 21.800 millones de dólares (16.900 millones de euros) con su estreno en el New York Stock Exchange a 68 dólares por acción. Es la mayor oferta en la historia del parqué y potencialmente del mundo. Se convierte así en una de las mayores empresas cotizadas, con una capitalización próxima a los 168.000 millones de dólares (132.000 millones de euros), el doble de McDonald’s y más que Repsol, Iberdrola y Telefónica juntas.
Los inversores llevan tiempo deseando esta operación, que se lleva anticipando desde hace años. Los analistas esperaban que se colocara en la parte alta de la banda de referencia y así fue. Si los bancos que dirigen la colocación ejercen sus derechos, la recaudación ascenderá a más de 24.000 millones de dólares y superará la del Agricultural Bank of China en Hong Kong. Lejos quedan los 60.000 dólares de la primera inversión cuando se creó hace 15 años.
Alibaba, convertida en un símbolo de la pujanza china, rebasa ya los 19.650 millones que se embolsaron los propietarios de Visa en marzo de 2008, el récord hasta la fecha en Wall Street. La segunda mayor oferta hasta ahora era la de General Motors, con 18.140 millones recaudados en noviembre de 2010. Facebook aparece la cuarta tras la energética italiana Enel, con 16.000 millones. Banco Santander Brasil cae del bloque de las diez más grandes.
La valoración de la empresa es 24 veces mayor que su beneficio y en el primer canje podría superar en valor bursátil a Facebook. Eso pese a que los inversores hayan expresado sus dudas por la compleja estructura corporativa del gigante de comercio electrónico fundado por Jack Ma. De hecho, los que se hagan ahora con sus acciones no tendrán una participación directa en la compañía china, sino en sus filiales establecidas en las Islas Caimán.
Ma quiere que Alibaba sea tan reconocida como Google y Facebook, los dos grandes referentes en Internet. Nadie cuestiona su éxito, pero hay inversores que ven riesgos y prefieren no participar en el espectáculo, porque no quieren comprar cosas que no entienden. Agregan que el 80% de su negocio es comercio electrónico y está concentrado en China, lo que le resta margen de crecimiento si el consumo en ese país se modera.
La ambición de Ma
El fundador de Alibaba insistió, durante la presentación de la oferta, en que hay que ver la compañía como un conglomerado global. Las perspectivas de crecimiento de Jack Ma están puestas ahora en EE UU y Europa. La oferta le da una masa ingente de capital para realizar nuevas adquisiciones con las que alimentar sus aspiraciones de expansión, ampliar su base de usuarios, reforzar su ecosistema y realzar el negocio de gestión de datos.
Entre las firmas objetivo figuran Snapchat, Kik, Roku, Rackspace, Akamai e incluso Lions Gate. La gran incógnita es qué pasará con Yahoo!. Jerry Yang, su cofundador, hizo hace una década una maniobra estratégica que le está aportando suculentos beneficios, al invertir entonces 1.000 millones. La tecnológica estadounidense controlaba el 23% antes de la oferta. Ahora se desprende de 140 millones de títulos, que le aportarán 9.500 millones.
Lo que está por verse, por tanto, es qué va a hacer con esa masa de efectivo Marissa Mayer, su consejera delegada. Como Alibaba, con este dinero puede embarcarse en nuevas compras para intentar revitalizar la compañía. No será en todo caso mucho cuando se descuente lo que reparte a los accionistas y lo que deberá pagar en impuestos. Además, la ambición de Jack Ma es tan grande, que podría acabar adquiriendo Yahoo!.
La oferta de Alibaba debe servir también para ver el margen que tiene Wall Street para seguir subiendo. El Dow Jones y el S&P 500 están a niveles récord, aunque a base de movimientos muy cortos. El Nasdaq, el mercado que utilizan tradicionalmente las empresas de la nueva economía, está en máximo que se vieron antes del estallido de la burbuja tecnológica. La atención es tal, que la firma china taponó el mercado de las ofertas de acciones.